Matías ha hecho un dibujo tan bonito que quiere exponerlo. Quizás en una sala pequeña y silenciosa o, mejor, en la sala más importante de un famoso museo. Pero pronto va a descubrir que exponer una obra en casa de un buen amigo puede ser muy reconfortante y tal vez mucho mejor que hacerlo en un museo.
Rocío Martínez
"Yo quería compartir con los niños esas frustraciones que tienes cuando estás aprendiendo a dibujar; cómo quieres que algo te salga bien y nadie te entiende, o cómo crees que algo te ha salido maravilloso y se estropea de la forma más tonta. Quería explicarles a los niños que eso nos pasa a todos: niños, mayores o topos." Rocío Martínez